martes, 6 de mayo de 2008

Looking Life Through My Rear view

La campanas sonaron muy temprano esta mañana, sólo quedó el olor moribundo de una botella vacía de ron. A sabiendas de todo lo que podría pasar con tan sólo dirigir mi vista al sol; preferí mejor ocultarme de la vida para no sentir el dolor. Cuantos "Padre Nuestros" mis labios rezaron, antes de sentir el amargo, antes de comer del pecado, antes de sentir la pescozada sin mano de la vida. Caminar por el sendero que la vida me había trazado, ver como poco a poco muchas cosas se iban de mi lado, ver el amor fusilado; todo por no haberlo soportado.
Se colaron por entre los dedos muchos amores que una vez juraron ser eternos, muchos que jamas podrían compararse con el infierno, muchos que jamas se pudieron esconder de lo que ya no siento. Debajo de la lengua; la picadura de mosquito que me acordó a la llamarada de desilusión que una vez se desató en el inmaculado perdón de una rosa purpura la cual se inventó con la tinta oscura del pecador y que una vez vino a mi para que creyera que si cambiara lo hacia sólo por mi. Al pasar de los años me convertí en el hombre mas feliz del mundo, pero al revisar mi brújula sólo me di cuenta de que la ilución y la dejades no hacen rumbos, sólo te quedas en el vaso vació dando tumbos. La vida? Bien gracias, hoy cargo con el amor de Dios, la pureza y admiración de mi hijo ( Khris) quien todos los días me levanta del suelo y me aparta del mal sueño reflejando en el cara/ cruz de la suerte; un amor a confianza.
A ocultas de la felicidad; la paranoia me deja circundado en una botella de dolor con los brazos abiertos al cielo voceando a todo pulmón " DIOS" mientras unos menos afortunados, me repiten ` Dilo Mas Fuerte, No Puede Escucharte`.
Miguel Shulterbrandt

1 comentario:

EmyVida dijo...

diablo shutter... te pasaste si!

que impotencia!

abrazosh!