Dormido por una eternidad caminando entre la maleza se sonrojó ante el antojo del despojo y susurró en la despedida como si fuese lo ultimo que le pasara en la vida, la poesía se tornó un desastre mientras el accidente vocal se convirtió en un disparate, callado en la oscuridad con la soledad que pesa como elefante y el amor al loco de la vida le hizo un desplante.
El corazón necesitó sobrevivir por eso el transplante, muchas mujeres lo miraban y le llamaban con disque amor" Ven para ayudarte, para curarte, para que al cerrar tus heridas te des cuenta de que es mas importante tu vida, aun no esta vencida, aunque diste mucho; no esta perdida"
Por eso lo veía dispararse en la avenida, metafórico perdido en la huida, frió como el hielo, en las estrofas no hablaba, solo como no poderlo imaginar, caminando con el corazón hecho hielo, de tanto temor; se le fue el miedo y morir a mano de algún estribillo fue la mejor opción a convertirse en problema, satirizando el amor en cualquier fonema y rompiendo su ilusión por ser toda una víctima de la confusión, papelote quien se encampanó en el bullicio de algún balcón y morir antes de que el doctor le diera el resultado de la pulsación.
El invierno con frió se le confundió mientras escribía y sintiendo lo que la vida le decía se preocupó por violar la ley de la gravedad y aceptar el chantaje de tener por primera vez la certeza de saber perder lo que una vez jamas pensó perder.
Mientras el corazón arde como leña seca en el infierno y no se sabe si es mejor perderlo que recuperarlo, compartirlo a volver a amarlo, dejarlo libre a querer retenerlo.
Miguel Shulterbrandt
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